Comprar un compresor industrial de aire es una inversión importante, y hay varios aspectos clave que debes considerar para asegurarte de adquirir el equipo adecuado para tus necesidades. Aquí tienes una guía detallada:
- CFM (Pies cúbicos por minuto): Verifica el caudal de aire que el compresor puede suministrar. Asegúrate de que sea suficiente para las herramientas y equipos que planeas operar, así como tener en cuenta los factores de corrección necesarios (coeficientes de mayoración, fugas, simultaneidad, etc.).
- PSI (Presión) Confirma que el compresor pueda alcanzar la presión necesaria para tus aplicaciones y su rango de presión maxima.
- Compresor de pistón: Ideal para aplicaciones intermitentes y uso moderado.
- Compresor rotativo de tornillo: Más eficiente y adecuado para uso continuo en aplicaciones industriales.
- Compresores centrífugos: Recomendados para grandes volúmenes de aire y aplicaciones pesadas, aunque estos últimos, tienen el inconveniente de un estrecho margen de proveedores y suministro de partes y aceite, para sus mantenimientos.
- Eléctrico: Más común para aplicaciones interiores y es más silencioso.
- Diésel o gasolina: Mejor opción para lugares sin acceso a electricidad o para uso en exteriores.
- Un tanque más grande es útil si necesitas almacenar aire comprimido para aplicaciones de alta demanda, estableciendo además un correcto balance de carga descarga, para un mayor ahorro de energía, además del cuidado de la unidad de compresion.
- Verifica el consumo de energía del compresor y considera modelos con tecnologías de ahorro energético, como controladores de velocidad variable (VSD).
- Revisa los materiales de construcción (acero, aluminio) y el diseño general para garantizar una larga vida útil y resistencia al desgaste.
- Investiga la frecuencia y el costo del mantenimiento. Prefiere modelos con componentes de fácil acceso para reparaciones y mantenimiento, así como Dealer con disponibilidad 24/7 y con la tecnología para análisis predictivos, los que ayudaran a establecer el mejor plan de mantenimiento que garantice y cuide su inversion.
- Si el compresor estará en una zona cerrada o cerca del personal productivo, elige uno con un nivel de ruido aceptable o considera comprar una carcasa insonorizada.
- Asegúrate de que el compresor tenga un sistema de enfriamiento eficiente (por aire o por agua) para evitar sobrecalentamientos, preferiblemente el primero, a no ser que se cuente con torres de enfriamiento, por lo simple y conveniente de su aplicación.
- Un buen sistema de filtración es clave para evitar la contaminación del aire comprimido, especialmente en industrias sensibles como alimentos o farmacéuticas, además del consecuente ahorro energético que se vera reflejada en la eficiencia volumétrica de su compresor de aire.
- Considera el espacio disponible para instalar el compresor, teniendo en cuenta las normas técnicas para el país o región, además de las facilidades para el mantenimiento y si necesitas moverlo con cierta frecuencia.
- Asegúrate de que el compresor cumpla con las normativas locales e internacionales de seguridad y eficiencia energética.
- Revisa la garantía ofrecida y verifica que el fabricante o distribuidor tenga un buen servicio de soporte técnico y repuestos más comunes disponibles 24/7.
- No te enfoques solo en el precio inicial. Considera el costo de operación, mantenimiento y energía a lo largo de su vida útil, el segundo de mayor importancia, por su tendencia constante a la alza y su consecuencia directa en el costo del producto final.
- Opta por marcas reconocidas con un historial comprobado de calidad y fiabilidad, no obstante y como una variante económica, consultar los nuevos productos Aftermarket, todas las marcas establecidas actuales y avances tecnológicos, tuvieron un comienzo.
Hacer una lista de tus necesidades específicas y consultar con expertos o distribuidores especializados puede ayudarte a tomar una decisión bien informada, apoyándolo inclusive a calcular el costo de amortización de su inversión.